Los renovadores cafayateños deberán afrontar en este año electoral más desafíos que los otros partidos, ya que tendrán que rendir cuentas de los dos primeros años de la gestión en la Municipalidad, intentar quedarse con las bancas de senador y diputado del departamento, pero por sobre todas las cosas, conseguir el número suficiente de concejales que le aseguren a Fernando Almeda tranquilidad para encarar lo que le queda de mandato como intendente.

Fernando Almeda, Intendente de Cafayate

“Casita” sabe que el mejor de los escenarios lo puede llevar a conseguir tres bancas del Concejo Deliberante y que esta vez tendrá un cuerpo deliberativo de siete miembros, lo que le dará menos margen de maniobra.

Para conseguir los tres concejales deberá mejorar la elección que lo erigió intendente, esto es superar la barrera del 40% de los votos. Para ello deberá contar con una lista de candidatos a senadores y diputados que traccionen la elección hacia esos niveles.

El Partido Renovador de Cafayate no tiene hoy nombres definidos para las categorías de Senador y Diputado. Hace algunas semanas Almeda supo de la negativa, aparentemente definitiva, de Gabriel “El Colorardo” Domingo para ser candidato. Ahí estaban centradas las esperanzas del actual Intendente.

A partir de eso comenzó la danza de nombres que podrían integrar la propuesta renovadora para las elecciones legislativas. En estos días recobró fuerzas el nombre de Mariana Cayón a quién se sindica en esferas del PRS como posible candidata a Diputada. Aparentemente Zottos es quien más impulsa esa posibilidad. Incluso se especula con que esto fue lo que motivó la radicación de la aerofonista en nuestra ciudad.

En la categoría de senador el nombre que se baraja con más fuerza en las últimas horas es el de Sebastián Aguirre, actual asesor legal de la Municipalidad. Tampoco se dejó de mencionar el del actual Secretario de Obras Públicas, Ignacio Carón. Pero todo está en un terreno de análisis y la lista podría crecer.

Una de las mayores dificultades que tiene que enfrentar Almeda es la falta de una estructura política que acompañe su gestión. La falta de ese sustento hoy es más evidente que nunca. Un hombre cercano a las decisiones del PRS le dijo en estos días a radiocafayate.com que “el problema que tenemos es que casita ganó solo, fue su figura y nada más, no hay una dirigencia con la que se pueda contar para las principales candidaturas”.

Será un tiempo complicado para el Intendente de Cafayate, pues un triunfo o una derrota lo tendrán como responsable y las consecuencias, para bien o para mal, repercutirán en su gestión.