Un hombre ató a su esposa a una silla, le puso una soga al cuello e intentó ahorcarla.Los gritos y los pedidos de ayuda hizo reaccionar a vecinos que en forma rápida se llegó hasta la casa de la víctima y la auxiliaron antes que su esposo consuma el homicidio.
El martes, hacía poco más de una hora que había anochecido en Cafayate y en el cielo las estrellas brillaban, minutos antes de las 20. De repente, una mujer y su hijo escucharon una violenta discusión entre una pareja que vive en la casa de al lado, en el barrio Los Módulos. Rápidamente los gritos se transformaron en una mezcla de llanto y pedidos de auxilio de la mujer, que tiene 33 años.
– «Vamos a ver qué pasa; ella está pidiendo ayuda», dijo el joven a su progenitora.
No había tiempo para golpear la puerta ni pedir permiso. Así que ambos ingresaron en la casa de sus vecinos y vieron una escena espeluznante: el hombre -de 37 años- estaba parado fuera de una pieza que está al fondo de la casa. Él tiraba con fuerza de una soga, como tratando de sujetar o elevar algo pesado. Al mirar con más atención, madre e hijo vieron que la esposa estaba sentada y atada a una silla de plástico blanco. Alrededor del cuello tenía atada una soga que subía hasta un tirante de hierro, en el techo de la habitación, y cuyo extremo era del que tiraba el esposo. Para evitar que la ahorcara, el joven de 20 años tomó impulso y empujó al atacante, quien cayó al suelo y soltó la soga.
Huida
Madre e hijo atendieron de inmediato a la joven, a la que ya le faltaba el aire y tenía evidentes signos de ahorcamiento. Le quitaron la soga alrededor del cuello, intentaron tranquilizarla para que volviera a respirar y llamaron a la policía.
El agresivo esposo aprovechó que sus vecinos estaban ocupados en atender a su mujer y huyó de la casa.
Un móvil policial que patrullaba por las calles de Cafayate fue derivado desde la comisaría 60, que había recibido el pedido de ayuda.
En pocos minutos cuatro policías llegaron a la vivienda, donde fueron recibidos por los vecinos que habían evitado el homicidio de la joven. Ella estaba sumida en llantos y nervios. Una ambulancia la llevó al hospital, acompañada de dos policías.
En la guardia le diagnosticaron «contusión leve en ambos brazos, contusión en cara anterior del cuello con pequeños surcos provocado por un elemento constrictor».
Arresto
Los vecinos dijeron a los otros dos policías que el violento esposo estaba vestido de jean y camisa blanca, y que caminaba con dos muletas. Con esta información la Policía comenzó a buscarlo y lo detuvo poco después. Cuando lo atraparon, los efectivos vieron que en la ropa tenía manchas de sangre. Fue llevado detenido a la comisaría 60, donde quedó a disposición de la Fiscalía de Cafayate.