Tras caminar cuatro días, el martes por la noche llegaron a la Catedral de Cafayate para honrar a la Virgen del Rosario.
Llenos de emoción fueron recibidos pasadas las nueve de la noche por fieles de Cafayate que los esperaban en la plaza y en la zona de la Iglesia de Cafayate.
A lo largo de la peregrinación por la Ruta 40, los devotos de Molinos transportaron una caja de color roja en la que depositaron las peticiones a “La Sentadita” de toda esa comunidad.
Traían también pan para ofrendar a la patrona de Cafayate en símbolo y petición de trabajo.
Al llegar a los pies de la Virgen del Rosario y ofrendar su sacrificio, María, una de las peregrinas entregó con su caja unas coplas de rogación a “La Sentadita”