Con una conexión cloacal provisoria, sin dársena de espera para el ingreso de colectivos, sin rotonda ni semáforos, el gobierno y el municipio quieren que antes de fin de mes comience a operar.
Dos meses después del montaje de la “inauguración para la foto” de la polémica terminal de Cafayate, las autoridades empiezan a sentir fuerte el desgate al que se sometieron por los gruesos errores de cálculos y planificación del proyecto que obligó a “parcharlo” varias veces.
A esto último hay que sumarle las incontables mentiras referidas a las cloacas de la Banda de Abajo que tras dos años de promesas e incumplimientos solo pudieron realizar una conexión provisoria, autorizada por Aguas del Norte luego de presiones políticas muy fuertes -a pesar de que aún faltan varias bocas registro-, y que los nuevos piletones siguen siendo una promesa y los fondos llegados para su construcción un misterio. Finalmente apremiados por intentar cumplir “con algo” conectaron la zona y la terminal a la ya colapsada red general cloacal de Cafayate.
Las empresas que operarán serán tres: Flecha Bus, El Indio y Aconquija, aunque aún no se sabe de cuánto será el canon que deberán abonar porque no está establecido por ordenanza, lo mismo que el precio de los alquileres de locales comerciales.
Esto ingreso recién la semana pasada al Concejo Deliberante a pesar de que la terminal está a poco de cumplir dos meses de “inaugurada”, en otra de las tantas desprolijidades que rodean la cuestión.
Tampoco estarán operables las “dársenas para el turismo” que según las autoridades del gobierno de Urtubey y la Municipalidad de Cafayate “están” en frente de las dársenas para colectivos de líneas en donde hoy solo se ve un gran arenal delimitado por un cordón.
Pero quizá lo más peligroso de la cuestión es la absoluta falta de seguridad que significa el ingreso de los colectivos llegados por el norte que deberán estacionar en plena ruta para girar en caso de que tengan que esperar el paso de vehículos que circulen de sur a norte porque a pesar de que las autoridades sostienen que hoy “hay” una dársena de espera sobre la vereda de la hostería del ACA, pero allí hoy se ve el cordón cuneta tal cual existe hace muchísimos años. Tampoco se ve hoy un semáforo colocado en el lugar para organizar el acceso y salida de los colectivos. Nadie entiende porque no se planificó, ni se previó la construcción de una rotonda de acceso entre tantos errores del proyecto.
La terminal tiene fallas gruesas y mucha improvisación. El gobierno provincial y municipal tienen mucha premura en ponerla a funcionar, vaya a saber por qué, a pesar de que ya pasó el momento pico del movimiento en el transporte de pasajeros.
Bien Nepomuceno. No hay que informar nada. Hay que decir que en Cafayate las calles están hermosas así vienen los inversores y hacen pelota sus autos, tampoco hay que decir que hay asaltos así vienen, invierten en hoteles y los cafayateños puedan afanarlos para tener plata, por supuesto que hay que decir que jamás se corta el agua en ningún barrio, que las cloacas son un lujo y hay capacidad de sobra en los piletones y por sobre todo que no hay un solo caso de violencia en nuestra ciudad.
INVERSORES COMPREN YA¡¡¡¡¡¡en la ciudad más perfecta y desinformada del mundo¡¡¡¡¡¡
Se que no es culpa de la prensa, pero las referencias de una ciudad turística como la que brindan ustedes dan un panorama desolador para posibles inversionistas. Barrios de emergencia, sin cloacas, abusos, violaciones, intentos de robo a mano armada,