Se calcula que el 80% de los afiliados a diferentes gremios participan de la toma pacifica. Desde el jueves de la semana pasada reclaman el pago del sueldo y de  horas extras.

El conflicto municipal llegó a un punto culmine este miércoles cuando en las primeras horas de la mañana y tras una asamblea, los empleados de la Municipalidad de Cafayate decidieron tomar el edificio ante la falta de respuestas de Fernando Almeda.

Los gremios municipales reclaman con paro desde la semana pasada el pago de los sueldos y las horas extras ya que el Intendente depositó soló el medio aguinaldo.

La falta de respuestas y el total silencio oficial empeoraron el ánimo de los empleados ya que ni Almeda ni ninguno de sus funcionarios intentaron comunicación alguna con los gremios y se niegan a atenderlos.

Este martes los empleados se apostaron en el canchón municipal a la espera de respuestas, pero solo hubo silencio por parte del Intendente y allí se empezaron a analizar otras medidas.

El hartazgo llegó al límite este miércoles y minutos antes de las siete de la mañana unos ochenta empleados ingresaron al edificio apostándose en el patio central. Otro grupo permanece afuera del edificio.

Hasta las 09:30 ni el Intendente Almeda ni ninguno de sus funcionarios se habían presentado a trabajar en la Municipalidad.  La medida de fuerza tiene paralizada las actividades municipales desde el viernes de la semana pasada.

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