Este lunes cerca de cuarenta personas se manifestaron en frente del edificio del legislativo municipal mientras se desarrollaba una reunión de comisión de concejales.
La presencia del grupo de entre cuarenta y cincuenta personas llamó la atención al principio lo que termino haciendo que se llegaran al lugar móviles policiales .
Los manifestantes fueron primero por la Municipalidad de Cafayate, cerca de las 20:00, en donde hubo forcejeos con la policía luego de que intentaran ingresar hacia las oficinas. Tras algunos momentos de tensión y violencia, un grupo de uniformados quedaron apostados en el edificio municipal.
Entre los manifestantes se encontraba Paola Renfijes a quien se intentó desalojar de un módulo este lunes por la mañana a solicitud de la Secretaría de Tierra y Hábitat de la provincia por denuncia de inhabitabilidad.
Los manifestantes reclamaron que los concejales tomen intervención en la cuestión ya que, según Renfijes, Tierra y Hábitat planea cerca de 40 desalojos, todos por el mismo motivo: que los adjudicatarios de módulos no los habitan.
Los ediles presentes en ese momento en el Concejo Deliberante manifestaron que la cuestión no estaba dentro de su competencia, que es un tema que con exclusividad pasa por Tierra y Hábitat y que es allí a donde se deben dirigir los reclamos.
La cuestión tomó un cariz político cuando hizo su aparición en el lugar la exsenadora y ahora precandidata Silvina Vargas, supuestamente en carácter de representante legal de Paola Renfijes.
No dejó de notarse la coincidencia de la aparición pública después de un largo período de silencia de Vargas, con la presentación de su candidatura, ya que fue en ese momento surgió el extraño reclamo hacia los concejales para que acompañen con sus firmas e incluso con algún tipo de resolución, tal cual contó uno de ellos, el recurso de amparo presentado en la justicia por Renfijes.
También reclamaron al concejal Sergio Saldaño por un proyecto presentado para que se aceleren las escrituraciones de Los Módulos para lo que se requieren inspecciones ambientales.
Finalmente lo que al principio fue visto como un reclamo legítimo de vecinos preocupados, terminó por ser leído como una movida de aprovechamiento político de la candidata Vargas para involucrar a los concejales en la cuestión de los desalojos y generar conflictividad social.