Lucía Ramos Frías casualmente se encontraba en México la semana pasada cuando se registró el sismo de 7,1° en la escala de Richter, con epicentro en la ciudad de Puebla.
“Afortunadamente estoy muy bien y agradecida a la vida por permitirme estar hoy contando esto, ya que hay tantas personas que no tuvieron la misma suerte. Ahora estoy en el sur de DF, Ciudad de México, más precisamente en la delegación Tlalpan pero estaba hospedada en un hotel en El Centro histórico a cinco cuadras El Zócalo. Allí estaba en el piso seis que era el último piso del hotel así que por seguridad me fui de allí y me recibió una bella familia aquí en su casa de Tlalpan”, explicó desde México Lucía Ramos Frías, fotógrafa de bodas y nacimientos y que está radicada en la capital salteña, según publicó La Gaceta de Salta.
Quien la recibió fue Evelin Flores, una fotógrafa mexicana que conoció durante el viaje y le ofreció recibirla en su casa para que pueda sentirse acompañada y segura. “Simplemente no sé cómo agradecerles toda la bondad y amor a la familia Bravo – Flores, que me están tratando maravillosamente y cuidando de mi como a sus propios hijos. Todos los mexicanos son realmente increíbles personas, amables, respetuosos y sobre todo extremadamente solidarios. Pero esta familia se robó mi corazón y estaré toda mi vida agradecida por tanto amor”, expresó la fotógrafa.
Según Lucía, la situación ahora es muy preocupante para muchos sectores de la ciudad que se vieron muy afectados. “Siguen buscando personas bajo los escombros y no cesa de llegar la ayuda a todos los lugares de derrumbes. Anoche llovió y eso complicó bastante las cosas para los voluntarios que están ayudando a buscar las personas, pero hoy por suerte ya volvió a salir el sol y siguen trabajando incansablemente en la búsqueda”.
Después de observar eso, Lucía tuvo una idea: regalar a una pareja de novios sus honorarios y, a cambio, les pide que depositen Para un donativo a la cuenta oficial de Topos o Cruz Roja. Mirá su publicación en Facebook:
«Espero que alguna pareja se quiera sumar y si son dos mucho mejor. Todo ayuda, y no puedo quedarme con los brazos cruzados ante tanto dolor. Quiero aportar mi granito, entregar un lindo recuerdo y que ese dinero llegue a buen destino. Este país y su gente me está dando mucho amor y yo quiero devolverles un poquito también.
Como algunos saben estoy en la CDMX y el día de ayer un terremoto afectó la ciudad. Gracias a la luz que me acompaña estoy en perfecto estado con una hermosa familia mexicana que me resguarda con mucho amor.
Para colaborar con todo el pueblo Mexicano quiero ofrecer las fotos de una boda a cambio de un donativo a la cuenta oficial de Topos o Cruz Roja. Es necesario que El donativo se realice entre el 20 y 25 de septiembre. Si sos novi@ y te interesa una fecha, por favor contáctame para coordinar la fecha disponible entre noviembre y diciembre. El comprobante de depósito se debe entregar de forma física para que sea válido».
«Apenas dejó de temblar salimos a la calle y eso sí que era un verdadero caos. Sirenas, gente desesperada corriendo, algunos delirando y diciendo cosas muy feas. Realmente un espanto”, expresó Lucía.
Lucía recuerda vívidamente el momento en que sintió el sismo: “Estaba a punto de subirme al metro o subte, como le decimos nosotros. Dios quiso que no termine de pasar esa barrera, porque si no la historia hubiera sido seguramente mucho peor al estar ahí abajo. La tierra empezó a temblar con muchísima fuerza y los policías que allí estaban nos pidieron que conservemos la calma y nos quedemos ahí quietos, no dejaron que salgamos a la calle hasta que cesó el movimiento”, contó a LA GACETA.
“Mucha gente entró en pánico lógicamente, todos rezaban y se tomaban de las manos con mucha fuerza. En ese momento estaba acompañada de Lety, una señora mexicana que me hizo conocer esa misma mañana un mercado de la ciudad. Nos agarramos fuerte de las manos y nos aferramos a un pilar, porque el movimiento era tal que si no te sujetabas te caías. Fueron minutos eternos, dicen que dos y medio, pero para mí fueron infinitos. Apenas dejó de temblar salimos a la calle y eso sí que era un verdadero caos. Sirenas, gente desesperada corriendo, algunos delirando y diciendo cosas muy feas. Realmente un espanto”, expresó.
Con respecto a lo que se encuentra viviendo en estos momentos, Lucía explica: “La verdad es que la ayuda aquí es realmente emocionante. La cantidad de personas en los centros de acopio y en las zonas damnificadas es enorme. Cientos de personas ayudando de alguna u otra manera, emociona hasta las lágrimas. Ayer junto a Evelin y su esposo Luis fuimos a brindar un poco de ayuda en un centro de acopio de Tlalpan, cerca de donde se derrumbó una escuela con niños dentro. Llevamos medicamentos y comida para bebés, lo que pudimos conseguir. Las farmacias ya casi no tienen nada, todo el mundo está comprando todo para ayudar. Pero más allá de eso, estuve todo el tiempo pensando de que otra forma poder ayudar, mediante la fotografía que es a lo que me dedico. Se me ocurría hacer algo aquí pero está más complicado. Por pensé en hacer lo que un grupo de fotógrafos hará en DF: una cobertura de boda a cambio de un donativo”.
bien ahi..!!!