La acción sanitaria se realizó gracias al convenio del Gobierno con la Fundación Saravia Olmos.
En el hospital Nuestra Señora del Rosario, un grupo de médicos de la Fundación del Instituto Hugo Saravia Olmos realizó tareas de asistencia y controles oftalmológicos a más de un centenar de personas de la zona, entre niños y adultos.
Las tareas fueron supervisadas por un equipo técnico-legal de la Secretaría de Gestión Administrativa del Ministerio de Salud Pública de la Provincia.
Carolina Saravia Olmos, representante de la Fundación y especialista en patologías de la vista, señaló que en esta oportunidad la mayoría de los pacientes atendidos fueron menores en edad escolar, que asisten a escuelas rurales o albergues escolares de parajes alejados como Tolombón, San Luís, Yacochuya, El Divisadero y Las Conchas, entre otros.
Especificó además que alrededor de 20 adultos fueron tratados en el marco del programa Salta Libre de Cataratas. También se realizaron evaluaciones para posibles intervenciones quirúrgicas o tratamientos con lentes terapéuticos.
La profesional explicó que la Fundación trabaja con personas carenciadas, de bajos recursos y sin obra social, brindando asistencia oftalmológica oportuna y de calidad a personas que residen en el interior provincial, especialmente en zonas dispersas, para que puedan acceder a una mejor calidad de vida, independientemente de la patología visual que posean. Además de los operativos que se realizan en el interior para evaluar la salud oftalmológica de la población, la especialista indicó que si una persona fue diagnosticada con cataratas o desea solicitar información sobre las intervenciones que efectúa la organización, pude solicitar mayores precisiones comunicándose al número telefónico 0800-4446684, en el horario de 8 a 16.
La Fundación Saravia Olmos funciona desde el año 1997 y desde esa fecha realiza salidas al interior de la provincia brindando asistencia a pacientes con enfermedades de la vista.
En el 2013 la institución rubricó un convenio de colaboración con el hospital Arturo Oñativia, a través del cual se establecieron las operaciones de ojos para todos aquellos pacientes de alta vulnerabilidad social que tuvieran cataratas.