El Intendente logró evitar nuevamente una licitación con la aprobación del cuerpo deliberativo.
Fernando Almeda había enviado el pedido de una sesión especial y urgente tratamiento para la adjudicación directa a una cooperativa de la obra de construcción del puente peatonal de El Divisadero por un monto de $700.000.
Este martes a las 12:30, ingreso un proyecto de ordenanza para la adjudicación de la obra largamente postergada de construcción de la pasarela de El Divisadero luego de que en el año 2015 el río se llevara la anterior, también construida por esta gestión municipal.
Se volvió a aplicar en esta nueva contratación directa la metodología de presión al Concejo Deliberante con supuestos apuros o urgencias que hasta ahora al Intendente le salieron bien gracias al incondicional apoyo de los tres concejales almedistas y de dos concejales radicales, Rodrigo «Toti» Chocobar y Daniel Guantay.
Esa mayoría, ya practicamente automática y disciplinada, le dio nuevamente sus frutos mostrando una enorme capacidad de captación de voluntades dentro del cuerpo deliberativo.
Lo cierto es que Almeda repitió nuevamente la vieja fórmula que tan buenos resultados le da. Remitir los pedidos de sesión especial el mismo día al que son convocados los concejales, después de las 12:00. Envía uno o tres presupuestos, siempre de las mismas cooperativas, las que de manera rotativa van siendo beneficiadas por el presupuesto más bajo, por lo tanto la adjudicada, en un sistema que podría llamarse, “Ahora sí toca, ahora no te toca”.
Este modus operandi que terminó por transformar al Concejo Deliberante en una simple escribanía donde solamente se dedican a refrendar lo ya definido por Almeda y su gabinete, también tiene que convivir con las «presiones» del propio intendente, funcionarios, cooperativistas adjudicatarios de las obras, o vecinos “casualmente” convocados para el momento.
La sesión
Tal lo pedido por Almeda, a las 20:00 del martes comenzó la sesión especial con una exposición de la presidente del cuerpo, Rita Guevara, quien trató de darle una adecuada interpretación a la Carta Orgánica y al reglamento interno del Concejo para justificar la apurada sesión especial solicitada por Almeda.
Esta vez fue el propio intendente quién actuó de vocero del proyecto y lo defendió ante los ediles.
Cuestionamientos de Patricia Castro
La concejal radical criticó que nuevamente se recurriera a un supuesto apuro para una adjudicación directa y cuestionó duramente la ilegalidad de la convocatoria, reclamó que no se podía aprobar algo con total desconocimiento del proyecto ya que no se lo envió con tiempo para analizarlo y qué nuevamente no se llame a licitación.
Almeda reaccionó notablemente ofuscado en defensa del proyecto aduciendo nuevamente la urgencia de la contratación por la proximidad de las lluvias y que la provincia en el mes de marzo le reintegraría el dinero destinado para esta obra haciendo constar que los más de $ 700.000 que se invertirán son propios del municipio, de un ahorro que llamo superávit de más de $6.000.000, sin detallar en que cuenta bancaria se encuentra ese monto, ni el origen.
Pero la aprobación del proyecto comenzó a perfilarse cuando se escuchó a los concejales radicales Rodrigo “Toti” Chocobar y Daniel Guantay quienes convertidos prácticamente en ediles oficialistas justificaron la urgencia de la contratación lo que hacía prever que tras un cuarto intermedio Almeda consiguió dejar en manos de una mayoría de concejales la responsabilidad de otra adjudicación directa.
La nueva contratación directa fue aprobada con los votos de los almedistas Ariel Barroso, Adrián Torres y Gabriel Corregidor con el acompañamiento disciplinado de Rodrigo Chocobar y Daniel Guantay.
La concejal Patricia Castro tras cuestionar la metodología del intendente para lograr las contrataciones, el nulo conocimiento que los ediles tienen sobre el proyecto y la falta de información del origen de los fondos decidió abstenerse.
estos concejales son una vergüenza.
acomodo de la cooperativa de torres con la complicidad de corregidor y barroso. los radicales toti chocobar y guantay son pechos frios, son panqueques. se les termino las aspiraciones políticas a todos estos impresentables
Otra vez con lo mismo…. de nuevo negociados.
estos concejales que tanto criticaban a los anteriores terminaron siendo peores.
ahora lo de toti y guantay es vegonzoso…. que hay por detras que terminaron siendo esclavos de casita