Será este lunes a las 19:00 desde el puente en la zona del balneario hasta la Municipalidad de Cafayate.
A medida que pasan las horas y la emergencia es atendida por los organismos provinciales dispuesto para la crisis, crece el malestar en la comunidad con las autoridades municipales, los legisladores provinciales y algunos exconcejales por la falta de obras y previsibilidad que disminuyan los fenómenos climatológicos.
Mientras se asiste a los damnificados y se intenta normalizar las actividades en Cafayate, en la población se agudizan las críticas y crece el malestar con las autoridades locales, con mayor énfasis en los afectados por este nuevo desborde del Río Chuscha.
Es que independientemente de la triste coyuntura por la que atraviesa la ciudad nuevamente, nunca se enfriaron las críticas por los últimos trabajos de canalizaciones en los que se invirtieron más de seis millones de pesos pero todo quedó en un manto de dudas respecto de la efectividad de los trabajos realizados y de sospechas por el manejo de los fondos.
Los vecinos de La Banda de Abajo, los más afectados en esta oportunidad, levantaron en aquel momento las voces reclamando por lo que entendían era un trabajo de canalización insuficiente y mal hecho, a la par que se plantearon sospechas por el manejo de los fondos asignados para tal fin.
Los puntos centrales de las críticas estaban puestos en los sedimentos extraídos del cauce y acumulados en las márgenes del río a pesar de que en el plan de trabajo y en el presupuesto estaba establecido que serían llevados del lugar, lo que nunca ocurrió. En su momento hubo denuncias cruzadas respecto de que ese trabajo se pagó pero no se hizo.
En ese momento los cuestionamientos apuntaron directamente al Intendente Almeda y sus funcionarios, a los exconcejales que aprobaron a las apuradas la autorización de un plan de trabajo que nunca tuvo claro los alcances ni las obligaciones, todo bajo el pretexto de una supuesta emergencia, la que nunca existió y a los legisladores departamentales, el senador Sergio Saldaño y el diputado Sergio Cisneros ya que nunca mostraron preocupación por el tema ni hicieron absolutamente nada serio ni relevante al respecto.
Tras el nuevo desborde de este último sábado y pasado los momentos más críticos, recrudecieron las críticas y las redes sociales fueron una enorme caja de resonancia de ello, recordando las advertencias que se hicieron en ese entonces de que los trabajos eran insuficientes y estaban mal hechos.
El malestar en la comunidad creció en las últimas horas y surgió la convocatoria a marchar desde el puente del Río Chuscha hacia la Municipalidad para reclamar soluciones serias y definitivas a la problemática.