En todos los casos tenían los váucher correspondientes y en algunos casos pagadas las reservas. Algunos se fueron a Cachi.
Un nuevo episodio de cruces, destratos y confusiones se produjo este viernes en el control de La Punilla con turistas que llegaban a Cafayate para pasar el fin de semana.
Según pudo comprobar radiocafayate.com, una importante cantidad de turistas no fueron autorizados a ingresar a nuestra ciudad este viernes.
En todos los casos tenían los váucher, pero por orden del titular del COE de Cafayate, Carlos Vargas, muchos de ellos no pudieron ingresar a Cafayate ya que acreditaban su domicilio en Salta a través de certificados de residencias otorgados por la policía de Salta y/o facturas de servicios públicos a su nombre, en donde se consigna la dirección, lo que está aceptado tanto por las autoridades del Ministerio de Turismo de Salta, como también, por parte de la Policía de Salta.
Una de las tantas personas a las que no se les permitió el ingreso este viernes, exhibió a los policías apostados en el control de La Punilla un audio del Secretario de Seguridad de la provincia, Benjamín Cruz, en el que afirma que tanto el certificado de residencia como una factura de servicio de Salta a nombre del turista, son válidos.
A pesar de esto, a los turistas se le informó, después de más seis horas de espera, que tanto el doctor Carlos Vargas como el Intendente Fernando Almeda prohibían el ingreso a Cafayate.
En este caso sería bueno que tanto Vargas como Almeda, informen porque sospechan que los certificados de residencia emitidos por la Policía de Salta pueden tener información falsa.
Algunos de los frustrados visitantes decidieron iniciar trámites en Cachi para pasar el fin de semana consiguiendo que de manera casi inmediata les envíen los váucher y las autorizaciones correspondientes para ingresar a ese municipio. Algunos regresaron hasta El Carril para viajar por la Ruta 33 y la Cuesta del Obispo y en otros casos consiguieron la autorización para seguir viaje, con custodia policial, por la Ruta 68 hasta los límites de Cafayate por la Ruta 40, hacia el alto Valle Calchaquí.
Lo ocurrido este viernes no es la mejor manera de alentar al escaso turismo salteño que se moviliza en estas épocas difíciles a que opte por Cafayate como destino, tras el papelón de la vergonzosa ordenanza aprobada en el Concejo Deliberante que intentaba cobrarle un impuesto a los turistas por ingresen a nuestra ciudad.
En este sentido sería bueno que los funcionarios municipales o del COE Cafayate comuniquen con claridad a las autoridades sanitarias; de turismo y policiales de la provincia, y a los salteños en general, que en Cafayate no serán aceptadas las excepciones pensadas para fomentar el turismo y que se difunda ampliamente en toda la provincia que Cafayate no los recibirá a menos que tengan domicilio acreditado solo en el DNI y de esa manera evitarles, gastos, pérdidas de tiempo y disgustos en tiempos donde es innecesario sumar a la población tensiones.
Con esto último, tanto las autoridades del Ministerio de Turismo de la provincia y las autoridades policiales sabrán informar oportunamente a los interesados en viajar a Cafayate que este será el único municipio de la provincia que no les permitirá el ingreso con certificados de residencia o boletas de servicios que acrediten su domicilio.
La otra es que tomen la decisión de cerrar el turismo interno en Cafayate hasta tanto termine la pandemia para evitar disgustos y publicidad negativa y que el COE junto con las autoridades municipales sugieran o creen alternativas para que los hoteleros y sus empleados , todo el sector gastronómico y sus proveedores; artesanos y todas las familias que directamente o indirectamente viven del turismo sobrevivir sin turistas.
Es una falta de respeto que un médico cambie las leyes ya establecidas y en vigencia para poder circular en pandemia con número de artículos y vigentes por la presidencia. Seguramente el turismo y los lugareños se lo reclamarán en el tiempo. Que siga dedidandoce a dal ibuprofeno
No se entiende la.posicion de.nuestro intendente. Mientras tanto la.imagen de Cafayate como destino turistico se derrumba.