Así lo anunció Carlos Vargas en su reaparición en el COE después de cruces con el Intendente Almeda. Se deberán derivar a Salta los nuevos pacientes y no hay respiradores para nuevos internados.
La situación es en extremó grave en Cafayate. El colapso del hospital es el reflejo del crecimiento de contagios y la fragilidad del sistema que se dispuso para enfrentar la pandemia.
Carlos Vargas, sin ningún tipo de autocrítica sobre el manejo epidemiológico, que estuvo y sigue estando en sus manos, dio un vaticinio atemorizador: «En algún momento vamos a tener que decidir a quién le ponemos el respirador y a quién no», dando muestras de lo precario y de la absoluta falta de previsión y preparación del sistema sanitario para enfrentar la pandemia.
En la conferencia del Comité Operativo de Emergencia de Cafayate (COE) convocada para este martes en la mañana por el intendente Fernando Almeda y el doctor Carlos Vargas comunicaron que las camas y servicios disponibles para pacientes positivos para Covid-19 están al 100% de ocupación.
Preocupa también la edad de los internados graves ya que la mayoría son jóvenes, mientras que los pocos casos de cafayateños de edad avanzada evolucionan favorablemente.
Por su parte el Intendente Fernando Almeda afirmó que la actual situación sanitaria del municipio nada tiene que ver con la apertura al turismo ya que pudieron constatar con los demás integrantes del COE que ningún turista solicitó atención médica, “está claro que no es el turismo” afirmó, sin que Vargas dijera nada, lo que llamó la atención ya que el gerente del hospital de Cafayate, de manera pública y permanente, suele echarle la culpa de la situación al turismo interno, aunque esta vez se llamó a silencio.
Almeda tambien reconoció que el COE no tiene capacidad para controlar los locales habilitados ni las actividades que se reanudaron por el levantamiento de restricciones, “es el momento más complicado del municipio, pero se necesitaba una reactivación económica”, sentenció.