Tres emprendedores en Cafayate están implementando este método para el cultivo de lechugas que aseguran un mejor rendimiento, una mejor calidad de la planta y sobre todo una mejor sanidad.

La ingeniera en recursos naturales y medio ambiente María Fernanda de la Zerda, el agricultor Rafael García Fernández y el ingeniero agrónomo Álvaro Habjan son tres pioneros en el valle de este tipo de cultivos y en conversación con Radio Cafayate 95.1 comentaron sobre sobre las ventajas de este método.

¿Qué es la hidroponía?

-» La hidroponía es una técnica de cultivo en la que no se utiliza suelo, y los nutrientes que necesita la planta para crecer son provistos a través del agua de manera manual. Para eso se vierten los minerales y sustratos que necesita la planta en un contenedor con agua que se bombea a unos tubos de PVC donde se ubican las plantas. De esta manera, la planta absorbe el agua con los nutrientes sin necesidad de tocar tierra.»

¿Cuáles son las ventajas de este método de cultivo?

Una de las ventajas de la hidroponía es que el requerimiento de espacio es menor, ya que se calcula que por cada metro cuadrado en tierra se pueden plantar 8 lechugas y con la hidroponía se pueden obtener 160 plantas en la misma superficie.

Al no entrar en contacto con la tierra los cultivos no están expuestos a plagas o enfermedades lo que permite higienizar mejor la planta a la hora de consumirla.

Al estar las canaletas de cultivos elevadas del suelo el trabajador no exige tanto su postura y puede acomodar el cultivo a una altura cómoda.

Una de las más importantes es que se optimiza el uso del agua ya que se la planta va absorbiendo el agua a medida que lo necesita.

La producción hidropónica permite desarrollarse en lugares donde no hay tierra o es de mala calidad.

Y por último, al realizarse en un invernadero cerrado la producción es factible en climas variados.

¿Hace cuánto que cultivan y como se recibió el producto en Cafayate?

-«El proyecto comenzó justo cuando empezó la pandemia. Hace casi dos años que empecé con la idea pero no tenía todas las herramientas técnicas de este tipo de cultivo por eso lo llamé a Álvaro para trabajar y también se sumó Fernanda (Esposa), que es ingeniera en recursos naturales y venimos trabajando desde entonces.» Cuenta Rafael García Fernández.

«Al principio tuvimos unos inconvenientes con el viento cafayateño que se nos llevó parte de la estructura del invernadero y el plástico que lo recubría. También tuvimos problemas el frío repentino que tuvimos en 2020 lo que nos redujo dramáticamente la producción. 

Todo eso nos sirvió para aprender y ahora comercializamos a los hoteles, restaurants y algunos mercados de barrio también.

Las plantas que sacamos además tienen mas tiempo de vida una vez fuera de las canaletas de riego que una lechuga de cultivo convencional. El hecho de que lleguen limpias también es muy atractivo para los que nos compran.

Además de lechugas ¿Qué otro producto están sacando?

-«Algo que estamos probando y, que hasta ahora nos viene bien, son los brotes de rabanito y de cebolla. Lo que estamos haciendo es poner, por ejemplo, 100 semillas de rabanito en bandejas de 10 cm x 20 cm y germinarlas durante 7 o 10 días y ese brote concentra todos los nutrientes del fruto maduro y logra una intensidad de sabor más fuerte.

La hidroponía es un método de cultivo innovador y que puede solucionar muchos problemas de cultivo ya que se puede realizar dentro de una ciudad abaratando los costos de transportes desde un campo, aún si es cercano.

Si bien la inversión inicial es costosa, el rendimiento del sistema, bien implementado puede sacar, según este equipo de emprendedores un promedio de 8 o 9 cosechas por año.