Se define como un trastorno del aprendizaje caracterizado por la dificultad para leer.
Este trastorno del neurodesarrollo se calcula que afecta aproximadamente a uno de cada diez niños provocando fracaso escolar. Para hacer frente a esta situación y mejorar el aprendizaje es necesario detectar el trastorno de forma precoz, ya que, en nuestro país la educación se basa en la lecto-escritura, y es aquí donde estas personas presentan los mayores problemas.
Uno de los principales problemas es que este trastorno es incompatible con el sistema educativo, pues todo el aprendizaje pasa por el código escrito, con lo que un niño disléxico no puede asimilar los contenidos en su totalidad porque no es capaz de encontrar su significado mediante la lectura.
La dislexia se presenta en niños con niveles normales de inteligencia y visión.
Algunos de los síntomas son el retraso para aprender a hablar y leer, y la dificultad para aprender nuevas palabras.
La mayoría de los niños con dislexia puede salir adelante en la escuela con la ayuda de docentes especiales o programas de educación especializada y acompañamiento profesional adecuado. Si bien el tratamiento puede ayudar, esta condición no tiene cura.
¿Qué es la dislexia?
La dislexia es un trastorno del aprendizaje que consiste en la dificultad en la lectura debido a inconvenientes para identificar los sonidos del habla y aprender a relacionarlos con las letras y las palabras (decodificación).
¿Cómo ve una persona con dislexia?
A una persona con dislexia le lleva mucho tiempo pronunciar una palabra al leerla. Y como la lectura le lleva más tiempo y concentración, con frecuencia no captan el significado de la palabra y no logran comprender bien lo que leen. No es de extrañar que las personas con dislexia tengan dificultad con la ortografía.
¿Cómo se trata? Síntomas de la dislexia
La dislexia no afecta solo a la dificultad en el aprendizaje de la lectura y la escritura, las personas con este trastorno también pueden tener dificultades en el área de la velocidad de procesamiento, en las habilidades motrices o en la percepción visual y/o auditiva. Pueden ver afectada la memoria a corto plazo, la organización, la secuenciación o el lenguaje hablado.
Es importante puntualizar que cada persona disléxica es única y no tiene por qué presentar la totalidad de síntomas para serlo. Los síntomas que pueden identificarse son:
- Problemas en la lateralidad.
- Nociones espaciales y temporales alteradas
- Confundir palabras con pronunciación similar.
- Dificultad para articular o pronunciar palabras.
- Trasponer las letras, cambiar el orden e invertir números.
- Lectura con errores y muy laboriosa.
- Problemas de concentración en la lectura o escritura.
- Dificultad para seguir instrucciones y aprender rutinas.
- Problemas en el equilibrio.
- Problemas de memoria a corto plazo.
- Dificultades para organizar sus pensamientos.
- Problemas para mantener la atención.
- Dificultades en matemáticas.
- En algunos casos, y más en aquellos mal manejados se presenta la dificultad en el habla.
Tipos de dislexia
Desde una perspectiva cognitiva, se estudian las Dislexias Adquiridas tras una lesión cerebral y las evolutivas, diferenciando 3 tipos de dislexia:
La dislexia fonológica, la dislexia superficial y la dislexia profunda
Adquirida: La dislexia adquirida aparece a causa de una lesión cerebral concreta.
Evolutiva: No hay una lesión cerebral concreta que la haya producido. Es la más frecuente en el ámbito escolar.
Asimismo, otra posible clasificación según los síntomas predominantes del paciente es:
- Fonolótica o indirecta
Se trata del mal funcionamiento de la ruta fonológica. El niño hace una lectura visual y deduce en vez de leer. Por ejemplo, puede leer “casa” en vez de “caso” Los niños con este tipo de dislexia pueden leer las palabras familiares, pero les resulta difícil leer palabras desconocidas, palabras largas o pseudopalabras.
- Superficial
El trastorno se encuentra en el funcionamiento visual, leen utilizando la ruta fonológica. Los niños que la padecen no tendrán problemas a la hora de leer palabras regulares, pero sí a la hora de leer palabras irregulares, por ejemplo, del inglés. Asimismo, la velocidad lectora de estos niños disminuye cuando aumenta la longitud de las palabras, cometen errores de omisión, adición o sustitución de letras y suelen confundir palabras similares (un ejemplo sería abría o habría).
- Míxta o profunda
Están dañados los procesos de lectura, el fonológico y visual. Provoca que se cometan errores semánticos.
¿Cómo ayudar a una persona con dislexia? ¿Cómo trabajar con un niño con dislexia?
El niño debe comenzar de la mano de un especialista una terapia con el objetivo de mejorar las dificultades que presenta en el aprendizaje de la lectoescritura. Dentro de su tratamiento el terapeuta puede juzgar conveniente realizar un programa de estimulación cognitiva enfocado en áreas de intervención que mejoren las dificultades específicas del aprendizaje inherentes trastorno.
Una vez que se ha diagnosticado dislexia a un niño, este puede llegar a leer con un nivel apropiado para su edad e inteligencia. El tratamiento que podemos seguir con estos niños se basa en la paciencia y en la fuerza de voluntad, además, debemos conocer los puntos fuertes del niño y destacarlos ya que también pueden padecer problemas emocionales o de autoestima. Las nuevas tecnologías son herramientas que nos pueden ayudar en gran medida con estos niños.
Por otra parte, debemos considerar que estos niños necesitan un plan individualizado que se ajuste a sus características y necesidades.
Por Laura Rodriguez Torres