Una mujer de 49 años falleció en el hospital de Cafayate. Se trata de la quinta muerte en la provincia por la enfermedad que transmite el mosquito.
El Ministerio de Salud de la Provincia confirmó esta tarde un nuevo deceso por dengue en Salta. Se trata de una mujer de 49 años que falleció en las últimas horas en el hospital de Cafayate.
Es el quinto fallecimiento en lo que va de año en la provincia, a raíz de la enfermedad que transmite el mosquito Aedes Aegypti, lo cual preocupa tanto a las autoridades como a la sociedad en general.
«Son 5 los fallecimientos notificados, el último se produjo en Cafayate, una paciente de 49 años que fue asistida en el hospital Nuestra Señora del Rosario», informó el Ministerio de Salud.
La mujer había mostrado una evolución de dos días y, a pesar de los esfuerzos del personal médico, la paciente falleció el martes por shock hipovolémico.
A la fecha, en Salta se notificaron 6479 casos de dengue y 82 de chikungunya.
El martes también se había confirmado la muerte de un joven de 20 años, un caso que conmovió a la opinión pública ya que no presentaba enfermedades de base, según sus allegados, y además era deportista.
Los otros fallecimientos por dengue en Salta
El primer fallecido por dengue en la provincia se notificó el 28 de febrero, un hombre de 78 años que sí presentaba otros problemas de salud. Su resultado positivo del tipo DEN2 fue confirmado luego de su muerte.
Una mujer de 77 años fue el segundo deceso confirmado, el 10 de marzo. Luego se confirmó la muerte de una mujer de El Bordo, de 49 años, y que no tenía antecedentes patológicos relevantes.
El martes a las 15 se notificó el cuarto fallecido, el joven Luciano Moya, quien se encontraba internado en una clínica privada.
La prevención del dengue
Es esencial que la comunidad tome medidas preventivas para evitar contraer estas enfermedades, ya que el contagio solo ocurre a través de la picadura del mosquito Aedes aegypti, vector transmisor de dengue y chikungunya. Para ello, recomendamos encarecidamente:
Uso de Ropa Protectora: Utilice ropa con mangas largas y pantalones largos para reducir la exposición de la piel a las picaduras de mosquitos.
Aplicación de Repelentes: Aplique repelente de insectos en la piel expuesta para evitar las picaduras de mosquitos. Recuerde renovar la aplicación cada 3 horas aproximadamente.
Los síntomas del dengue
Vigilancia de síntomas: Esté atento a la aparición de síntomas como fiebre alta, dolores musculares, dolor de cabeza y erupciones en la piel, que podrían indicar la presencia de enfermedades transmitidas por mosquitos.
Evitar exposición al aire libre: En áreas donde se han reportado casos de dengue, evite exponerse al aire libre durante las primeras horas de la mañana y al atardecer, momentos de mayor actividad de los mosquitos.
Uso de Medidas de Protección Adicionales: Utilice espirales o tabletas repelentes en áreas propensas a la presencia de mosquitos. Proteja las cunas o cochecitos de bebés con mosquiteros tipo tul y aplique repelente sobre la piel expuesta de los niños.
Qué es el dengue
El dengue (fiebre quebrantahuesos) es una infección vírica que se transmite de los mosquitos a las personas.
La mayoría de las personas que contraen dengue no tienen síntomas. Cuando estos aparecen, suelen ser fiebre alta, dolor de cabeza y en otras partes del cuerpo, náuseas y erupciones en la piel. En la mayor parte de los casos, la persona se cura en una o dos semanas, pero a veces la enfermedad se agrava y requiere hospitalización.
En los casos más graves, el dengue puede ser mortal.
Se puede reducir el riesgo protegiéndose de las picaduras de los mosquitos, sobre todo durante el día.
El dengue se trata con medicamentos que alivian el dolor, pero por el momento no hay ningún tratamiento específico.
En la mayor parte de los casos, el dengue causa síntomas leves o incluso ningún síntoma y se cura en una o dos semanas, pero en casos infrecuentes se agrava y puede causar la muerte.
Cuando aparecen síntomas, lo suelen hacer entre 4 y 10 días después de la infección y duran de 2 a 7 días. Pueden ser:
- fiebre elevada (40 °C/104 °F)
- dolor de cabeza muy intenso
- dolor detrás de los ojos
- dolores musculares y articulares
- náuseas
- vómitos
- agrandamiento de ganglios linfáticos
- sarpullido
Las personas que se infectan por segunda vez corren más riesgo de que la enfermedad se agrave.
Los síntomas del dengue grave suelen presentarse cuando desaparece la fiebre. Son los siguientes:
- dolor abdominal intenso
- vómitos persistentes
- respiración acelerada
- hemorragias en las encías o la nariz
- cansancio
- agitación
- vómitos o heces con sangre
- sed intensa
- piel pálida y fría
- debilidad general
Las personas que presenten estos síntomas deben ser atendidas de inmediato.
Tras la curación, la persona se puede sentir cansada durante varias semanas.
Diagnóstico y tratamiento
En la mayor parte de los casos, el dengue se puede tratar en el domicilio con medicamentos que alivian el dolor. La mejor forma de no contraerlo es protegerse de las picaduras en los mosquitos.
Como no hay un tratamiento específico para el dengue, lo habitual es aliviar el dolor.
Contra el dolor se prescribe a menudo paracetamol, pero deberían evitarse los AINE (antiinflamatorios no esteroideos), como el ibuprofeno y la aspirina, porque aumentan el riesgo de hemorragia.
Si se contrae el dengue, es importante: descansar mucho, beber mucho líquido y estar atento a la aparición de síntomas graves, además de consultar al médico lo antes posible.
Transmisión de seres humanos a mosquitos
Los mosquitos pueden infectarse a partir de personas virémicas con el virus del dengue. Puede tratarse de una persona con infección sintomática o que todavía no haya manifestado síntomas (presintomática), aunque también puede ser una persona sin signo alguno de la enfermedad (asintomática).
La transmisión de seres humanos a mosquitos puede ocurrir desde 2 días antes de la aparición de los síntomas de la enfermedad y hasta 2 días después de la resolución de la fiebre.
El riesgo de infección del mosquito está directamente asociado a los niveles elevados de viremia y fiebre en el paciente; por el contrario, los niveles elevados de anticuerpos específicos contra el virus van asociados a un menor riesgo de infección del mosquito. La mayoría de las personas son virémicas durante 4 o 5 días, si bien la viremia puede durar hasta 12 días.