Así solía decir el el cantor, poeta y recopilador de anécdotas con mañas de historiador que aseguraba que no importaba si a veces había que cantar por nada: «Si el pueblo pide hay que darlo».
Calixto Rosario Rigal Ríos fue una personalidad destacada de nuestra querida Cafayate y recientemente reconocido por su trayectoria, junto a su proyecto de vida «Los de Cafayate», por el Senado de la Provincia por su aporte cultural e histórico.
Dueño de una voz que sabía viajar de una punta a la otra en las escalas para sacarle al público frases como: «¡Que falsete que tiene!». Rigal fue un cantor que desde muy chango quiso cantarle a su pueblo y 60 años más tardes logró hacerlo y contagiar a otros ese afán.
En 1964 «Rigal» funda junto a Hugo Guantay, Rosario “Rocha” Zuleta, Ramón Liendro y Rigal Ríos, el conjunto Los de Cafayate y comienza su aventura músical con la empresa de llevar, con pilchas gauchas, todo el acervo del valle a todo el país. Durante años el grupo logró conquistar distintos escenarios de la provincia y el país.
«Nunca falté a una Sereneta, solamente en una oportunidad tuve que estar como concejal y por eso no pude subir al escenario.», contaba Rigal en un asado, en el patio de la casa del «Turco «(Juan Carlos Abdala Ibañez). Su partida llegó junto con un viento calchaquí que ahora viaja por todo el valle llevando el canto de amigos y familiares que prefieren recordarlo en el templar de las guitarras, en la ronca angustia de las voces que le cantan y lloran y en la inmensa hondura de los parches de bombos.
El legado cultural que deja, no solo se evidencia en los escenarios y tertulias literarias, sino en esa carpeta con folios repleta de canciones sin música, poemas ahora sin voz e historias sin nombre.
La Despedida
En un tarde de otoño, los cantores y compañeros de Rigal Ríos, Julio Soria, Hugo Guantay, Sergio Guerra, Juan Carlos Abdala Ibañez, Exequiel Chavez, Miguel Otarola, Roque Zuleta, Mario Quiroga, Copleras cafayateñas, el memorioso Cacho Royano, Raul Rogelio Guantay Llampa, su hijo Emiliano y familia entera le brindaron su última Serenata.
Alrededor de las 16:30 familiares, músicos y amigos se dieron cita en el cementerio de Cafayate y le cantaron artista vallisto un último adiós, luego de una emotiva recepción en la mítica Alameda este jueves a la medianoche.