En solo minutos, el granizo cambió el paisaje de la zona y a pesar de las postales sorprendentes, despertó preocupación en los vecinos del lugar por lo atípico de este fenómeno en esta época.
El paisaje de Jasimaná amaneció teñido de blanco por la fuerte caída de granizo y la crecida de ríos en el lugar y generó alerta en los vecinos de los parajes ya que es un hecho sin precedente en la zona.
Según el testimonio de los residentes la caída de granizo para esta época es poco frecuente.
Imágenes: Ofélia Vilte